Pequeñas instrucciones para el cuidado de los pinceles en un taller de dorado
Los pinceles para dorar son herramientas importantes para los doradores, restauradores de iglesias y artistas, y requieren un cuidado regular. Solo un pincel bien conservado permite un trabajo de alta calidad. Por lo tanto, la limpieza cuidadosa de los pinceles debe realizarse siempre inmediatamente después de su uso.
¿Qué producto de limpieza se debe utilizar?
La respuesta está relacionada con el material procesado y el diluyente y el disolvente utilizados con él.
Los líquidos diluibles en agua pueden eliminarse con agua sin problemas. Los pinceles de goma laca, en cambio, solo pueden limpiarse con alcohol. Los pinceles de óleo y barniz siempre deben cepillarse primero y limpiarse previamente con un paño, para luego comenzar a limpiarlos con un diluyente adecuado.
Los pinceles de pelo, cerdas y fibras sintéticas durarán mucho más si se lavan con un jabón especial, según el grado de suciedad y el disolvente utilizado. Enjabone bien los pinceles con agua tibia y luego aclárelos bien. El jabón para pinceles es hidratante y evita que los pelos del cepillo se vuelvan frágiles y se rompan. El cuerpo del pincel debe lavarse especialmente bien cuando se lava con jabón. Si los residuos de material procesado permanecen en el pincel, el borde de las virolas se endurecerá con el tiempo. Esto destruye el pincel, ya que el cuerpo del pincel se vuelve rígido y los pelos del borde de la virola se rompen.
Tras la limpieza, seque los pinceles con un trapo limpio y devuélvalos a su forma original. Es mejor colgar los pinceles para que se sequen, y no colocarlos sobre un calentador, ya que el mango se encogerá y la virola se aflojará y empezará a tambalearse. Solo después de que los pinceles estén completamente secos es aconsejable guardarlos de forma segura en un cajón, estuche o carpeta.
Tratamiento especial para paletas
Los pelos de las paletas pueden limpiarse cuidadosamente con una toalla de papel o un trapo limpio. En caso de mucha suciedad, moje cuidadosamente el pelo con agua tibia y jabón de cepillo y elimine los residuos. Aclare la paleta con agua limpia y colóquela sobre una superficie limpia. Alinee los pelos del pincel y séquelos con un paño. Coloque la paleta ligeramente húmeda entre las páginas de una guía telefónica y coloque algo pesado encima. De esta forma, la paleta se secará y los pelos se presionarán en forma plana. Al limpiarla, tenga cuidado de que la cubierta de cartón de la paleta no se moje y se disuelva.